domingo, 28 de abril de 2024

La burocracia como arma política

Hugo M. Delgado A.


En Venezuela el control político fue más sencillo, los gobiernos de Acción Democrática y Copei facilitaron el trabajo de Hugo Chávez de manipular al país porque la burocracia era muy grande, la gente -en su mayoría- dependía de la administración central y del ingreso petrolero, al igual, los empresarios respondían a los designo del Estado y los pocos capitales privados existentes se fugaron ante el inminente riesgo que se aproximaba en 1999.

En Argentina el peronismo, que prevalece en sus distintas facetas, hace varias décadas creó una red burocrática que ha garantizado su dominio en la política nacional, porque gran parte de la población depende de un gasto público que supera los ingresos, realidad evidenciada por la actual gestión de Javier Milei, que ha logrado controlar la inflación y el gasto eliminando varios entes creados en los últimos años de gobierno kirchnerista y beneficios improductivos que inflaron el gasto sin recursos para cubrirlos.

Colombia es el ejemplo más evidente de lo que hace un gobierno izquierdista para perpetuarse en el poder. En la tradición de estos mandatarios se les incrusta el chip que sus ideas y sus planes no aceptan discusión y son los mejores para la sociedad, ocultando sus verdaderas intenciones burocratizantes y de acaparar recursos generados por los impuestos de todos los colombianos que les servirán para financiar la red clientelar de cara a las futuras campañas. Lógicamente, en un par de años -por ejemplo- el sistema de salud y de pensiones colapsara por la mala administración, pero eso no importa.

La burocracia se ha convertido en el mejor aliado de la izquierda en Latinoamérica porque es fuente de corrupción, clientelar y de apoyo electoral para quienes pretenden perpetuarse en el poder, desviando totalmente la esencia de la gestión pública de ser promotora del desarrollo y garante de la aplicación de la justicia. Pretender el uso del Estado como fuente de garantía para ganar elecciones es un error que trae consecuencias futuras en materia de corrupción, gestión ineficiente y endeudamiento público.

Durante años, los gobiernos populistas argentinos alimentaron la corrupción, la ineficiencia y el clientelismo, creando una cómplice estructura social, política y empresarial, que generó un gasto y una deuda pública alta, improductiva e inflacionaria, que provocó el colapso del país, ya que en época de vacas flacas obligaba a buscar fuentes de financiamiento externas, que con el tiempo se fueron cerrando debido a la desconfianza que se provocó y le cerraba cada vez más las posibilidades de encontrarlas. Eso fue lo que sucedió al final del período del kirchnerista, Alberto Fernández, lo que le abrió las posibilidades a Javier Milei de llegar a la presidencia.

Venezuela contó con todos los factores para facilitar el control del chavismo desde sus inicios. El deterioro de las gestiones de Acción Democrática y Copei, y del modelo petrolero vigente, fueron los alicientes para que el plan se consumara. La sociedad cómplice con todos sus factores institucionales y de poder, cumplieron la misión de entregarle en bandeja de plata al país, a un personaje totalmente envilecido por un modelo cubano desprestigiado, empobrecedor y genocida.

Influenciada por el ingreso petrolero, la sociedad venezolana entregó sus armas al chavismo para que con ellas la fusilaran. Todos los sectores empobrecidos esperan con ansias las migajas de los recursos públicos para que les paguen un sueldo, una pensión o le den una bolsa de comida, que en nada mitigan su crítica situación. En las redes sociales expresan su miseria humana, esperando que “el amo corrupto” le de su pedazo de torta, y así periódicamente abre su boca o su mano para recibir su miserable recompensa.

En Colombia Petro, que siempre ha vivido de la política, juega con las mismas cartas de los grupos tradicionales que  han controlado el poder. Él no es la excepción, pues forma parte del sistema corrompido que domina la política colombiana. Todos los días los escándalos de sus acólitos sacuden los titulares de los medios de comunicación, mientras sus destempladas declaraciones ayudan a inundar de propuestas estériles los asuntos que necesitan soluciones, y que sólo generan una preocupante desinversión, y la caída del empleo y del consumo, mientras muestra un Estado empeñado en aumentar el gasto público y su burocracia estéril que repunta algunos puntos, para facilitar un discurso presidencial empeñado en venderlos como un acierto.

Es la trampa de creer que el Estado omnipotente, burocratizado, con tentáculos presentes en todos los espacios de la vida pública es el modelo a seguir. La experiencia Latinoamericana está demostrando que esa propuesta, con el tiempo, genera deuda, ineficiencia, una sociedad dependiente, cómplice, adormecida, y corrupta.

domingo, 7 de abril de 2024

Ley a conveniencia

Hugo M. Delgado A. Periodista. Artículo publicado el 7 de abril de 2024 en www.venezuelausa.org

Latinoamérica se ha convertido en un reducto de experimentos para la democracia, siendo los grandes perdedores los ciudadanos honestos que ven a su dirigencia política con desconfianza. Pero el peor ejemplo lo están dando los izquierdistas adeptos al Foro de Sao Paulo, que en un afán reivindicativo, cambian su nombre por el de Grupo de Puebla, para tratar de tapar los errores cometidos por sus líderes corruptos e ineptos como Hugo Chávez, Ignacio Lula da Silva, Cristina Krichner, Alberto Fernández, Rafael Correa, Gabriel Boric, Daniel Ortega, Andrés López Obrador, Gustavo Petro y Evo Morales, etc.

La izquierda que se sigue robando banderas para monopolizar temas como el medio ambiente, la pobreza, la justicia social, la reivindicación de las mayorías excluidas, la desigualdad, desperdició su oportunidad histórica de acoger las nobles aspiraciones de las mayorías injustamente tratadas. Ahora solo monopolizan esos intereses para llegar al poder, usufructuar los recursos públicos, vivir como los propios millonarios , no rendir cuentas y destruir cualquier vestigio institucional que limite sus poderes y sancionen sus actos irregulares.

Las dos décadas vividas en el siglo XXI solo muestran personajes izquierdistas que han resultado peores gobernantes que las élites que la antecedieron, con el agravante que las banderas enarboladas han fracasado, ocasionando mayores problemas de pobreza, destrucción de las instituciones que soportan la democracia, impunidad y mayor corrupción. La frustración de las masas resentidas que votaron por ellos con la esperanza de alcanzar la justicia histórica, es evidente, al punto que ya varios países de Latinoamérica comenzaron a ver para el otro lado: La derecha liberal capitalista.

Es lógico que ante cualquier acción hay una reacción y que dos décadas de gobiernos ineptos y corruptos dejaron un sinsabor. Eso sucedió en la Argentina de los Kirchner, la Bolivia de Evo, el Ecuador de Correa, el México de López Obrador, la Colombia de Petro, el Brasil de Lula, la Venezuela de Chávez y Maduro. Detenerse en el análisis de sus gestiones es suficiente para determinar que sus verdaderas intenciones son las de perpetuarse en el poder, destruyendo a todo lo que se oponga a sus intereses.

Lo ocurrido en Argentina con la llegada de Javier Milei, en El Salvador con Nayib Bukele, en Ecuador con Daniel Novoa y en Perú con la destitución de Pedro Castillo, son signos que muestran que las poblaciones se están cansando de estos experimentos que están llevando a los países latinoamericanos al caos y la pobreza. La izquierda que se vendió como la propuesta reivindicadora ha demostrado que son peores que la enfermedad.

Para ellos lo que vale son sus propuestas y han demostrado que su único objetivo es el poder. Son sordos ante cualquier planteamiento que los cuestione y viven en un mundo teórico/soñador que en nada beneficia a los más necesitados. Ocurre con el presidente de Colombia Gustavo Petro, que prefirió inmolar el sistema de salud solo para garantizar recursos económico para alimentar sus clientela política corrupta y acrecentar la burocracia del Estado para garantizar los votos para sus posibilidades de reelección en 2026.

Es lógico que su fracaso será evidente porque así lo demostró en su gestión en la alcaldía de Bogotá, pero antes que eso ocurra lograra su objetivo de crear una masa de apoyo con la burocracia que se formará con la expropiación de las Entidades Prestadoras de Servicio de Salud con miras a las elecciones de 2026.

El daño poco importa, lo que interesa es la garantía de mantenerse en el poder. Y es que en Latinoamérica esos experimentos han resultado en fracasos, sucedió en Argentina y en Venezuela, las empresas públicas y las expropiadas fallaron y dejaron una masa burocrática improductiva, sin soporte económico y empresas quebradas.

La mafia de la izquierda latinoamericana solo ha servido para arruinar a sus países y garantizar la impunidad para sus líderes corruptos, que luego de usufructuar los recursos públicos no pagan por sus pecados. Unos a otros se resguardan, Evo Morales luego de su expulsión de Bolivia fue protegido por el presidente de Argentina, Alberto Fernández, o con Rafael Correa, que luego de ser denunciado por el asesinado precandidato presidencial, Fernando Villavicencio, recibió la protección de Bélgica, alegando persecución política, cuando habían pruebas suficientes de su corrupción con la empresa petrolera China, la construcción de la represa Coca Codo Sinclair, la trama arroz verde y negocios oscuros con Alex Saab. Piedad Córdoba y Hugo Chávez.

El ingreso al espacio diplomático de la embajada de México en Quito (05-04-2024) para sacar al corrupto ex vicepresidente de Correa, Jorge Glas, es una violación a la ley internacional, pero también hay que analizar la injerencia en los asuntos internos de Ecuador, días antes, de López Obrador cuando puso en duda la legitimidad de Novoa porque fue favorecido por el asesinato de Fernando Villavicencio ocurrido el 9 da agosto de 2023, nada más lejano de la verdad porque antes de su muerte iba a presentar nuevas pruebas de corrupción contra el pupilo del Foro de Sao Paulo, implicado en casos de corrupción de miles de millones de dólares relacionados con el Odebrecht de Lula da Silva, Petrochina, etc.

El asilo otorgado por el gobierno mexicano protegía al corrupto Glas, es un lunar más dentro del mundo de la impunidad de la izquierda Latinoamericana que a su conveniencia la aplica, para favorecer a sus peones. Mientras el silencio cómplice oculta casos graves como el ocurrido en Chile, recientemente y que ya nadie dice nada, relacionado con el crimen del teniente, Ronald Ojeda, quien en calidad de asilado por el izquierdista, Gabriel Boric, fue secuestrado y asesinado por un presunto comando de la contrainteligencia del régimen de Nicolás Maduro.

La injerencia violenta, diplomática y financiera, de la izquierda en los asuntos de los gobiernos que no comulgan con su credo, es constante. Suficiente es escuchar los pronunciamientos de López Obrador, Petro, Lula, Maduro, Ortega, Díaz Canel (todos salen en coro al ataque) para evidenciar cuáles son sus intereses comunes, mientras -obviamente- guardan silencio ante los atropellos chavistas contra la precandidata de la oposición, María Corina, o la ley que silencia a la oposición venezolana, o los ataques a la embajada de Argentina en Caracas.


domingo, 31 de marzo de 2024

El túnel sin luz

 

A la memoria de Mariaelena Salazar y Manuel “El Chino” Chao, dos venezolanos ejemplares.

Hugo M. Delgado A.

El 23 de octubre de 2023, una luz de esperanza cubrió el territorio venezolano, al conocerse los resultados en las elecciones internas de la oposición, gana la favorita de todas las encuestas, María Corina Machado (MCM). Había llegado su turno, luego de los tropiezos de varios líderes que fracasaron en su intento de sacar del poder a Hugo Chávez y Nicolás Maduro, ahora ella tomaba la posta.

Una tarea difícil de lograr en un país “enterrador de líderes” cuando el objetivo no se logra. Con MCM las condiciones parecían ser diferentes, porque el grado de deterioro del país y sus angustias son mayores, y lo peor de su dirigencia política, especialmente la opositora, salió a relucir, mostrando una faceta terrible: Muchos viven de la situación de Venezuela y no están muy interesados en cambiar las cosas.

Poco importa la destrucción de los valores y principios democráticos, de la familia y de las instituciones, tampoco interesa el éxodo de personas que parece no tener fin y ya se acerca a los 8 millones de personas que huyen a cualquier parte del globo terráqueo.

La situación se complica y el chavismo demuestra que es una maquinaria engranada entre La Habana y Caracas, con las influencias de Moscú y Pekín. Más en un mundo con dos conflictos claves, como lo son el ruso-ucraniano y el israelí-Hamás/Hezbollah, más el latente conflicto chino-taiwanes. En ese contexto, Venezuela importa por su reserva estratégica petrolera y cercanía de Estados Unidos de América (EUA).

Venezuela perdió totalmente su espíritu soberano que lo caracterizó en su primeros 40 años de democracia, ahora sus decisiones se toman en La Habana, y Chávez y Maduro sirvieron de marionetas. Mientras, EUA mira para todos lados porque sus fronteras duras y blandas son muy amplias, y han dejado el problema venezolano en un segundo plano.

Machado llenó de entusiasmo a un país desesperanzado, cuya generación de relevo la perdió con la salida de sus jóvenes, la mayoría profesionales, de los expertos petroleros, de sus investigadores, académicos y representantes culturales. Una Venezuela que invirtió grandes cantidades en una preparación de un recurso humano que ahora produce en otros rincones del planeta.

Esa pérdida humana no importa a una nomenclatura mediocre y corrupta, porque el talento y la crítica son sus enemigos número uno. Ya lo reflejaba en una de sus tantas reflexiones el talentoso humorista, Laureano Márquez, cuando citaba la anécdota del general Carlos Soublette (1789-1870) ante la crítica de un actor de teatro que se burlaba de él, luego de ver el contenido de la obra, Soublette dijo: “Lo grave no es que el pueblo se ría del presidente, lo grave es que el presidente se ría del pueblo”. Márquez extrapolaba su cita a la Venezuela de la nomenclatura chavista, empecinada en atornillarse eternamente al poder, empeñada en poner preso a quien se atreva a contradecir y criticar sus intereses y destruir sus emblemáticas universidades.

Ese sueño de los venezolanos empeñados en la salida democrática, se desvaneció rápidamente. No previeron la estrategia cubano-venezolana de “poner piedras en el camino para entorpecer el andar de MCM”, para colocar “el payaso del circo”, que le hiciera el espectáculo perfecto para lograr la legitimidad del cuestionado Nicolás Maduro. Una vieja estrategia planteada por el pensador chino, Sun Tzu.

En la oposición hay quienes creen en la condena de quienes cometieron delitos de lesa humanidad y saquearon los dineros públicos, que paguen por sus pecados; pero también están quienes consideran que es necesario sacar al chavismo garantizando impunidad, conformando un “gobierno de transición” enlodado con los vicios del sistema. Un poco en la idea gatopardista de cambiar dejando las cosas iguales.

Con las piedras colocadas en el camino, el chavismo logró con su aparato judicial ilegítimo neutralizar a MCM y sacó su carta del candidato palabreado: Manuel Rosales. No era novedad que ocurriera, ya a principios de 2023 la decisión estaba tomada. Ahora la maquinaria propagandística de Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo, utilizando a mercenarios mediocres de la comunicación social, están dispersando el discurso que “la intransigencia de MCM va a perjudicar la noble cruzada del ungido por Nicolás Maduro y su nomenclatura; meten miedo diciendo que si “la oposición pierde” la responsable del fracaso es Machado !!!

Claro está que la victoria de Machado no le garantizaba su llegada a las elecciones de julio, porque Maduro y sus cubanos no le iban a “entregar el revolver para que lo matara”. El chavismo sabe que no puede ceder el poder, porque sus crímenes y la corrupción serían castigados. Si ganara Rosales tendría que garantizar impunidad; si pierde le haría un favor a Maduro porque le daría un toque de legitimidad, a pesar de todos los atropellos cometidos (detenciones, inhabilitaciones, corrupción, asesinatos, bloqueos de candidatura).

Ahora la luz que se observaba al final del túnel se desdibujó. De los Acuerdos de Barbados, lo poco que se ha visto ha favorecido al régimen, también es lógico pensar que si hay algún compromiso de ceder el poder hay que mostrar que los chavistas no se van a entregar fácil y venderán la imagen de lucha, hasta el final, por los ideales del fracasado teniente coronel, Hugo Chávez.

De los acuerdos solo se conoce la liberación de los narcosobrinos y del corrupto Alex Saab; la reducción de las sanciones económicas, la liberación de los ciudadanos norteamericanos y la extensión de la licencia de operaciones de Chevron. Pero nada se ha dicho de la estructura narco terrorista que domina a Venezuela: La presencia de terroristas del medio oriente, de las guerrillas colombianas, de los carteles mexicanos, de los chinos y los rusos, de la explotación ilegal del Arco Minero, la corrupción generalizada del poder judicial, etc.

Mientras tanto, el régimen se ríe de los venezolanos, que angustiados siguen huyendo, continúan las detenciones arbitrarias, la complicidad internacional es evidente y el régimen controla el poder luego de 25 años, imponiendo su agenda.


domingo, 24 de marzo de 2024

El mito venezolano

Hugo M. Delgado A. Periodista. Artículo publicado el 24 de marzo de 2023 en www.venezuelausa.org

Toda sociedad crea sus mitos para justificar ciertos comportamientos y creencias. El más destacado del período petrolero es la creencia del “somos ricos”. Sobre este aspecto, enfatizaba hace varios años, el JS Mikel de Viana. Su formación teológica, histórica, como investigador y docente, lo llevó a ser un gran crítico del régimen chavista, porque visualizó que el país había tomado el camino del afianzamiento de los males que había que contrarrestar. Por esa razón calificó “a la mejor constitución del mundo”, como irresponsable, ya que la mayor parte de sus articulados otorgaban derechos y pocos deberes, falla que -decía- impedía la conformación de un verdadero ciudadano responsable y comprometido con Venezuela.

Por presiones del régimen de Hugo Chávez tuvo que salir de Venezuela en 2006, obedeció el mandato de su orden y se marcho. Nunca más volvió a Venezuela. Criticó el mito de “somos ricos”, porque la realidad lo evidenciaba. Si eso fuera cierto, no habrían cinturones de miseria en las grandes ciudades, mucho menos millones de inmigrantes dispersos por el mundo y tampoco existiría los índices de pobreza de hoy.

Una situación que parece no importar al chavismo gobernante inepto y corrupto, que tomó el poder hace 25 años, gracias a la anuencia de una sociedad cómplice e irresponsable que le entregó un cheque en blanco a Hugo Chávez, para que hiciera lo que quisiera. Y a una dirigencia “opositora” endeble, mezquina y sin capacidad de construir una propuesta que rompiera con los vicios de la cultura petrolera. De la bonanza petrolera vivieron todos los sectores del país, por eso su silencio lapidario le permitió al autócrata construir su mundo.

Ese mito de la “Venezuela rica” hace estragos en una sociedad que todavía añora el país despilfarrador, corrupto e irresponsable. Los males que potenció Chávez fueron el cáncer que se gestó en el interior de una nación, que ahora vive las secuelas de su metástasis. Destruida la academia y la crítica construir ese cuerpo de ideas del modelo pos petrolero difícilmente se materializará. Están equivocados quienes siembran esperanzas en medidas de mediano plazo o toques mágicos generados por la errónea concepción “si llegan nuevamente las petroleras, los dólares correrán por las calles”, o Maracaibo tendrá calles con morrocotas. Esta reflexión también la hizo el padre de Viana.

Los problemas de la sociedad no se resolverán solo porque las corporaciones petroleras inviertan en el sector hidrocarburos, habrá mejoramientos en ciertas áreas y profundizará la corrupción, pero los desajustes estructurales de Venezuela seguirán. Ese era el profundo mensaje de Mikel de Viana. El chavismo no surgió de la nada, fue consecuencia de la descomposición institucional y de la pérdida de los principios y valores de una sociedad fundamentada en la falsa riqueza.

Hoy cuando la feligresía cristiana celebra el “Domingo de Ramos”, las enseñanzas son eternas. A Jesús, la encarnación del bien, lo condenó el pueblo que lo escupió y golpeó, que prefirió al bandido Barrabas. Fue víctima de los grupos de poder (los sumos sacerdotes) que vieron vulnerados sus privilegios y sus concepciones religiosas, y al no poder condenarlo, porque la verdadera autoridad la ejercía el imperio romano a través de Poncio Pilatos, lo entregaron. Pero ocurre algo, Pilatos se lava las manos y entrega al injusto prisionero para que sea la multitud la que lo condene a muerte.

De este análisis se desprenden varias lecciones que deben llamar a la reflexión. Los venezolanos irresponsables que eligieron a Chávez y a Nicolás Maduro (escogieron al bandido), sin medir consecuencias ahora se marcharon a Estados Unidos, Europa y otros países de Latinoamérica. Dejaron atrás el desastre, se fueron para garantizar el futuro de sus hijos porque ya el país no era confiable (me arrepiento y me lavo las manos). Incluso, con cinismo e inmoralidad, en las redes sociales y los medios de comunicación hacen críticas contra lo que antes apoyaron.

Unos dicen que se arrepienten, pero las muertes, las torturas, la ruina social, la destrucción de las instituciones, no pueden remediarse, el daño está hecho. Otros disfrutan sus inmensas fortunas en España, Estados Unidos de América (EUA), Panamá, Francia, etc, sin que tengan “un ápice de remordimiento de conciencia”, incluso hay personas admiradas porque “fueron vivos”. Otros exoneran a Chávez de toda culpa.

Así como en el momento de la captura de Jesús, las élites poderosas cuidan la estructura formal (ilegítima) del régimen de Nicolás Maduro, la que condena, justifica actos (represión, genocidios y robos), aprueba leyes, condenan, etc. La oposición organizada en el Grupo de los 3 también -tácitamente- hace lo suyo, porque muchos de sus dirigentes viven de la crisis. Es la complicidad social, en la que hasta los empresarios aprendieron a sobrevivir, pagando extorsión o especulando en detrimento del consumidor.

Con el lavado de las manos, Pilatos se quitó la responsabilidad de lo que venía, así como muchos medios de comunicación, empresarios, políticos, militares y venezolanos pecaron por acción y omisión. Guardaron silencio ante el acto destructivo que se avecinaba, y luego de condenar a Venezuela a su martirio, se fueron a disfrutar sus riquezas mal habidas y a buscar un “mejor futuro” para sus hijos.

El mito venezolano de la riqueza petrolera fácil va en el interior de cada uno de los que viven en los mejores barrios de Madrid o los condominios de Miami. Quienes aún se quedan, usurpan el poder y la riqueza sin importar la huida masiva que aún inunda con sus conciudadanos las selvas del Darién, en la frontera colombo-panameña (se calcula que en 2023 pasaron más de 250 mil y en el primer trimestre de 2024 suman 60 aproximadamente) o la destrucción de hospitales y escuelas o la mortandad niños por hambre.

Gente humilde de todos los estratos que huyen de los atropellos del poder o de la angustia del hambre, sin que a nadie les importe su sufrimiento, incluso los primeros inmigrantes ahora se creen dignos representantes de Venezuela en EUA y que la “chusma delictiva” de ahora no merece disfrutar “del sueño americano”.

Nada más lejano de la verdad, porque la gran mayoría de los inmigrantes de los tres últimos años han logrado adaptarse, buscar su legalidad, trabajar para ayudar a sus familiares atrapados en un país sin futuro visible, enderezar sus vidas porque han visto que trabajando se pueden lograr sus sueños, y dejar las malas experiencias atrás (extorsión, sicariato, atentados, hambre). En las redes sociales se observa que son los mismos venezolanos quienes afianzan el mito del Tren de Aragua, para convertirlo en una amenaza a la estabilidad norteamericana, y estigmatizan a su propia gente. Es el legado arrogante y excluyente de la “ Venezuela rica”.




lunes, 18 de marzo de 2024

El show electoral

 

Hugo M. Delgado A. Periodista. Artículo publicado el 17 de marzo de 2024 en www.venezuelausa.org

Es cuesta arriba ganarle, con elecciones libres y transparentes, a un régimen genocida y corrupto como el liderado por Nicolás Maduro y su nomenclatura. El primer efecto, luego de 25 años de gobierno, es que los venezolanos se acostumbraron a vivir bajo el yugo chavista, algunos incluso lo justifican y lo defienden, otros se fueron decepcionados a buscar nuevos horizontes.

Periódicamente, la sociedad venezolana sepulta líderes que fracasaron en la gesta de derrotar a Hugo Chávez (el padre del desastre) y su heredero, Nicolás Maduro (la perfecta marioneta escogida por La Habana para continuar el proyecto revolucionario). Ocurrió con Francisco Arias Cárdenas, Manuel Rosales (aunque políticamente no esté muerto), Henrique Capriles, Leopoldo López y Juan Guaidó.

Es el reto de María Corina Machado (MCM), continuar con vida o seguir el triste destino de sus antecesores. No se puede luchar con los principios y herramientas democráticas contra una régimen soportado por ideales dictatoriales y unos confusos métodos comunistas-capitalistas que le permiten a la sociedad vivir en un contexto con ideologías entrelazadas que han servido para justificar los desaciertos de Hugo Chávez y de Nicolás Maduro.

Difícilmente, Maduro y su nomenclatura cederá poder, porque si lo hacen se suicidan. El chavismo sabe que su rabo de paja los puede llevar a una fría prisión o a su muerte. Ocurrió con las elecciones de diciembre de 2015, cuando la oposición ganó la mayoría en la Asamblea Nacional y ese golpe solo materializó lo que ya se sabe: Venezuela no quiere más chavismo.

Esa victoria también demostró algo que hoy se evidencia en la oposición, la existencia de intereses y visiones divergentes en su interior. Una liderada, por el sector que apoya a María Corina Machado, proclive a sancionar a los corruptos y genocidas chavistas . El otro, representado por Henry Ramos Allup (Acción Democrática), Manuel Rosales (Un Nuevo Tiempo) y Julio Borges (Primero Justicia), interesados en facilitar un gobierno complaciente de transición: Apuestan por una salida negociada en la que se garantice la impunidad y el respeto a los intereses de la nomenclatura gobernante.

Cuando se ganó la elección parlamentaria de 2015, la existencia de grupos interesados en mantener la crítica situación política, impidió consolidar el golpe de legalidad que le generó la crisis económica al régimen, ya que no pudieron seguir buscando dinero fresco para continuar robando y financiando el gasto público que les permitía mantener a la sociedad con su “collar de arepas” (CLAP, bonos, subsidios, etc).

La gestión en la presidencia de la Asamblea Nacional de Ramos Allup (AD) y Omar Barboza (UNT) fue catastrófica y sepultó cualquier posibilidad de restar legalidad al régimen y desnudar las atrocidades humanas y el saqueo sistemático de un país que había recibido más de un billón de dólares por ventas de petróleo. El momento se desaprovechó y facilitó la reacción de Nicolás Maduro, para montar la estructura paralela ilegal, que al final del cuento resultó ganadora.

Sí resultó ganadora porque luego de la inhabilitación de la AN-2015 se montó una estructura ilegítima, que es la que rige actualmente, materializada en el mamotreto legislativo, ejecutivo, judicial y electoral que avala las decisiones de Nicolás Maduro y su nomenclatura. Y salió victoriosa porque es la que impone sanciones, habilita o deshabilita, condena, acusa, etc, sin que nada ni nadie lo impida, porque la sociedad venezolana y los gobiernos extranjeros reconocen sus decisiones.

Emulando al régimen homólogo de Nicaragua, Nicolás Maduro es fiel discípulo del guion represor de La Habana y del Foro de Sao Paulo. Ya lo demostró el corrupto presidente de Brasil, Ignacio Lula da Silva, cuando “le ordenó a MCM” buscar un sustituto para que participe en el show electoral impuesto por el Consejo Nacional Electoral (CNE) del régimen. Entre inhabilitaciones y trabas burocráticas y jurídicas, ha moldeado el candidato y el proceso electoral para garantizar su reelección, a pesar del amplio rechazo que tiene en la población.

A este modelado show electoral, se une la irresponsabilidad de los venezolanos que entregaron las negociaciones de su futuro a Estados Unidos de América, al G-3 y a un Gerardo Blyde que nadie sabe quién lo eligió. Obviamente los resultados no deben sorprender, EUA funciona de acuerdo con sus intereses (licencia de operación a la empresa petrolera Chevron y liberación de corruptos y narcotraficantes venezolanos a cambio de ciudadanos norteamericanos) y el G-3 hace lo mismo: Negocios y participación política.

Luego de la apabullante y nada sorpresiva victoria de MCM, en las primarias opositoras, la gente sembró sus esperanzas en ella, en su enorme liderazgo y los angustiados venezolanos comenzaron a sacar cuentas para salir de Maduro, de su mafia genocida y corrupta, de la prosperidad que se avecina rápida y sin mucho esfuerzo, porque “Venezuela es rica”, y los “dólares volverán a cubrir las calles”.

No dedujeron, que Maduro no iba a entregarle “una pistola a MCM para que le disparara”, facilitándole una victoria segura que la llevara a la presidencia. Pues no fue así. El chavismo aplica el principio de guerra de Sun Tzu: Colocar la mayor cantidad de obstáculos para impedir el avance del enemigo.

Esa es una constante aplicada por Chávez y ahora por Maduro, para evitar que el enemigo lo derrote en las elecciones que deben aparentar “ser libres, transparentes y democráticas”. Total en un mundo dominado por el “dinero y el consumismo”, cualquier cosa se puede comprar, incluso, la impunidad. Lo demuestran Joe Biden y Boris Johnson, cuando reconocen al ilegítimo presidente venezolano, en el momento de hacer negocios petroleros.

Cercar al enemigo es sumamente peligroso, Sun Tzu, lo advierte, “hay que darle opciones”, y Maduro y los cubanos saben que si ceden poder pierden, sería su muerte. Eso lo debe saber MCM y sus asesores. Los comunistas aprovechan los “boquetes” que deja la democracia para garantizar su permanencia en el poder, y en un mundo cada vez más pragmático (tal como lo recomendaba el extinto Henry Kissinger) se pueden violentar las normas y acuerdos, mentir y asesinar, tal como ocurre en la Rusia de Vladimir Putin, la Nicaragua de Daniel Ortega, la Argentina de los Kirchner y la Venezuela chavista.

El chavismo diseñó su show electoral, lo está materializando con el aval de una ilegítima estructura que ha cercado las opciones de una mayoría desesperada, que entregó su suerte a terceros y ahora sufre las consecuencias de su irresponsabilidad.

domingo, 10 de marzo de 2024

El difícil camino del bien

 

Hugo M. Delgado A. Periodista. Artículo publicado el 11 de marzo de 2024 en www.venezuelausa.org

Superado el comunismo de la Unión Soviética y sus aliados, el pensamiento democráticos que hace décadas brindaba oportunidades para superar las desigualdades históricas, impulsar la participación de los distintos intereses existentes en la sociedad y dar oportunidades para el emprendimiento individual, el panorama del siglo XXI ha dado al traste las nobles intenciones de quienes creían en el sistema de libertades impulsado por la democracia.

Contrario al imperio de la ley, el abanico de participaciones de los grupos mayoritarios y minoritarios generó el caos que vive el mundo de hoy, producto de las constantes fricciones entre ambos sectores, tergiversando el bien y el mal, lo correcto e incorrecto, dando espacios de acción a quienes aprovechando los nuevos escenarios impulsan ideas retrógradas que se pensaban superadas.

Uno de los aliados de este complejo mundo es el Internet, que si bien cambió los conceptos tradicionales de participación en la comunicación social, también estimuló la cultura de la mentira, en la que grupos sociales mal intencionados resquebrajan uno de los fundamentos de la democracia: la verdad. Es a través de ella que se alimenta la sociedad para encontrar las respuestas para tomar decisiones, por ejemplo, cuando de impartir justicia se trata o decidir sobre un asunto de interés general.

Latinoamérica se ha convertido en un polvorín de malos gobernantes. La obsesión por el poder utilizado para impulsar ideologías evidentemente autócratas e irrespetuosas de los principios democráticos, está impidiendo la evolución de sus países. La izquierda que se endosó las banderas de lucha contra las injusticias, se ha convertido en un cártel de corrupción e ineptitud, cuyos gestiones han agudizado las miserias humanas, sin ningún remordimiento.

Es lo que se ve en las experiencias de corruptos e ineptos como Ignacio Lula da Silva padre del Foro de Sao Paulo y la trama de Odebrecht, el escándalo de corrupción más grande del continente, Cristina Kirchner ( ya el marido Néstor se murió) en Argentina, Gustavo Petro en Colombia, Daniel Ortega en Nicaragua, el justificador y santurrón, Pepe Mujica en Uruguay, Rafael Correa en Ecuador, Hugo Chávez y Nicolas Maduro en Venezuela, Andrés López Obrador en México y Gabriel Boric en Chile.

Todos estos nefastos personajes se han convertido en malos ejemplos para la sociedad, porque además de la corrupción desatada en sus gobiernos, gozan de una inexplicable impunidad que impide que paguen por sus pecados. El principio dice que a toda acción le sigue una reacción, ellos fueron la reacción de las élites derechistas que vivieron a costillas del poder y desataron desmanes en sus respectivas épocas, pero la izquierda que se apoderó de todos los gritos de injusticia social en el continente resultaron peores.

Petro es ejemplo de ello, ya justifica sus actos de corrupción, inmoralidades, su violencia y sus amenazas con la normalidad de un mitómano sin pueblo, pero con un poder abusador tras el que esconde sus debilidades humanas y políticas. Igual, sigue gobernando una nación, cuyos grupos de intereses negocian, a cambio de prebendas, sin importar el daño causado a las mayorías.

Es lo que se observa en su obsesión por “echarle mano” a los fondos de pensión y los del sector salud, este último afectado por la falta de entrega de los fondos públicos a las EPS y que en última instancia perjudican notoriamente la calidad del servicio y al usuario. Pero eso no importa, el objetivo es tomar los fondos para ayudar a sus amigos y manipular a los más necesitados para convertirlos en fuentes de votos en las próximas elecciones.

Argentina es otra entelequia burocrática, que gasta más de lo que gana y ha postrado al país solo para satisfacer los intereses de la élite peronista y de los K , que solo quiere mantener los privilegios del poder. A la salida del delfín, Alberto Fernández, la pobreza superó el 50% y la inflación tocó casi el 200%. Luego de dejarle el muerto a Javier Milei, ahora lo presionan para que no desmonte la maquinaria clientelar y corrupta enquistada hace décadas.

En Venezuela el dolor no existe. El chavismo apoyado por una sociedad irresponsable que lanzó sus cuarenta años de democracia a la basura, gracias a la ineptitud de los partidos gobernantes, Acción Democrática y Copei que fueron incapaces de renovarse y ceder poder, ahora es la expresión máxima del autoritarismo y corrupción, con una nomenclatura genocida que ha propiciado la destrucción de la institucionalidad, de sus principios y valores, de su soberanía y el éxodo de más de 7 millones de habitantes.

Ahora que se aproximan las elecciones en México el legado de otro mitómano, Andrés López Obrador, no es envidiable. Si bien los indicadores económicos son excelentes, producto del desplazamiento de la inversión de Estados Unidos de América y sus compras (sustituyó a China como principal proveedor), los resultados de su gestión social son pobres, especialmente en materia de seguridad y corrupción.

El arte de gobernar implica orientar y navegar, relacionando ambas con los intereses de sus pueblos. Hacer el bien es el camino de la sensatez, la honestidad y la verdad, es fácil construirlo si se hacen las cosas bien, pero resulta que el relativismo para aplicar la ley y el explotar las debilidades humanas (miedos, resentimientos y necesidades básicas) se han convertido en los faustos en las relaciones ideológicas que han establecido los egoístas gobernantes comunistas en su afán de perpetuarse en el poder y usurpar los recursos públicos, lo que los ha llevado a imponer sus ideas como sea, aún a costa de la destrucción de los beneficios existentes (económicos, salud, educación).

A la acción la secunda una reacción. Es una ley lógica que impera en la naturaleza y las relaciones humanas. Eso va a suceder ante los desmanes de los regímenes comunistas. Hay experiencias que demuestran que unas tardan más que otras, como sucede en la Cuba de los Castro, pero otras han durado menos, como sucedió en la Chile de Salvador Allende. En el caso Venezuela, el control sobre la renta petrolera facilitó la estrategia chavista y a falta de los petrodólares, suministrados mayormente por las empresas norteamericanas, ahora queda el camino de la represión.



domingo, 3 de marzo de 2024

“...Hoy vinieron por mí; mañana irán por ti”

Hugo M. Delgado A. Periodista. Artículo publicado el 03 de marzo de 2024

Dice el hermano, Javier Ojeda, del recién asesinado teniente Ronald Leandro Ojeda Moreno, que él le decía que “sabía que venían por él”, por eso le entregó el borrador de su diario de 185 páginas en el que relató su historia, desde la detención el 25 de marzo de 2017 en el estado Apure, pasando por las torturas recibidas en la Dirección General de Contra Inteligencia Militar (DGCIM) y su escape el 30 de noviembre de 2017 de la prisión militar de Ramo Verde, el mismo centro de reclusión donde también estuvo Leopoldo López.

Las gráficas mostradas el pasado miércoles de 21 de febrero de 2024 en Santiago de Chile, evidencian que el grupo comando que lo secuestró no era hampa común, físicamente eran de tipología militar, dicen que tenían acento caribeño. Las crecientes sospechas de la prensa indican la injerencia de los servicios de contrainteligencia venezolanos.

Cuando el periodista del diario La Razón de Venezuela, Federico Alves, escribió, el miércoles 21 de febrero de 2024, que el secuestro del teniente Ojeda era resultado de una petición de los servicios de seguridad del régimen cuando firmó el convenio de colaboración policial con el gobierno de Gabriel Boric, el pasado 18 de enero de 2024 en Caracas, consideraron la versión como una simple especulación.

No era descartada esta hipótesis cuando habían antecedentes de gobiernos afines con el chavismo, como el de Colombia, cuando Juan Manuel Santo entregó al estudiante Lorent Saleh en 2014, sin importar que las denuncias de ONG defensoras de derechos humanos, ya advertían sobre la existencia de centros de tortura sistemática y la inexistencia de un poder judicial imparcial.

Escribe el periodista (La Razón 3-03-2024), Hernán Lugo Galicia, que durante su permanencia en la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), el teniente Ronald Ojeda Moreno optó por cumplir su juramento de defender el país y la Constitución y, por ello denunció los vínculos del Alto Mando Militar, Dirección General de Contra Inteligencia Militar y de personeros del gobierno de Maduro con la guerrilla colombiana, grupos organizados de delincuentes y de cómo los manuales de torturas, dictados desde Cuba, se aplican en Venezuela.

Una versión que dentro de las FANB y en especial en las zonas fronterizas entre Colombia y Venezuela no es un secreto, en especial los vínculos con las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional, y con el narcotráfico. A esto se agrega la injerencia de iraníes, chinos, cubanos y colombianos, señalan fuentes directas, en las oscuras operaciones que se hacen en el país en complicidad con el régimen. Por esa razón, dice el general (r) Antonio Rivero en su apreciación personal, se “ observa una participación del gobierno de Nicolás Maduro, a través de la inteligencia militar, con la participación de la delincuencia organizada presente en Chile, como es el Tren de Aragua”.

La declaración de la canciller de Argentina, Diana Mondino (03-03-2024), señalando la presencia de agentes cubanos y venezolanos en su país, que actuaron con “libertad” desde el gobierno de Alberto Fernández, ahora vienen a desestabilizar al presidente Javier Milei, también insinuó sobre la participación de estos grupos en los recientes disturbios en Ecuador.

Es una denuncia grave que se relaciona con lo ocurrido en los graves disturbios ocurridos en 2019 -principalmente- en Santiago de Chile, durante el mandato del reciente fallecido ex presidente, Sebastián Piñera, en Colombia, durante la gestión de Iván Duque, y en las revueltas en Perú en diciembre de 2022; hechos en los que participaron grupos delictivos de Venezuela, infiltrados en la diáspora que recorre todos los países del continente y Europa (el venezolano, Greg Oliver Higuera Marcano que actuó en el atentado del fundador de Vox en España, Alejo Vidal-Cuadras fue capturado en Cúcuta-Colombia el 17 de enero de 2024) .

Sospechosamente, la versión de Alves se descalificó, igual sucedió con la denuncia del ex comisario y ex preso político, Iván Simonovis, cuando anunció el secuestro del teniente Ojeda; las autoridades del gobierno de Boric han tratado de minimizar el hecho, argumentando que no pueden descartar ninguna hipótesis. Con el arresto de un menor de 17 años intentan desviar la hipótesis política.

Pero la cadena de hechos se atan desde la firma del convenio de cooperación policial en enero de 2024, la denuncia del fiscal del régimen chavista, Tareck William Saab, relacionada con el desmantelamiento del supuesto plan “Brazalete Blanco” (Esteban González-Amelia Eguiguron de www.unofar.col) para asesinar a Nicolás Maduro el 14 de febrero de 2024, luego de la delación del ex capitán Ányelo Heredia Gervasio (detenido el 14 de diciembre de 2023), pasando por la detención de varios militares, la defensora de derechos humanos, Rocío San Miguel, y ahora el asesinato del teniente Ojeda.

El trabajo de investigación del periodista Lugo da un detalle interesante, el plan era sacar a Ojeda por Bolivia (aliada del régimen), pero algo falló. Se rumora que el teniente coronel, Alexander Gramcko (alias mil caras), jefe de Operaciones de la DGCIM, está detrás de su secuestro y asesinato porque le pidió, en una de las reuniones de enero de 2024, al subsecretario del Interior de Boric, Manuel Monsalve, que se los entregara; él mismo lideró el operativo en el que asesinaron a Oscar Pérez (2018) y es acusado de dirigir la tortura que le causó la muerte del capitán, Rafael Acosta Arévalo (2019).

La muerte de Ojeda evidencia la estrategia instrumentada por los socios del Foro de Sao Pablo. Las primeras denuncias señalaban al Tren de Aragua, estas células que están llevando terror y muerte en varios países, principalmente, Colombia, Perú, Ecuador, Chile y ahora Estados Unidos de América, forma parte de una estrategia denunciada en abril de 1990 por el teniente Coronel del Ejército de EUA, Jimmie Holt:

Los revolucionarios por toda la América Latina entrenaron según el ejemplo cubano. Sin embargo, durante los años 60, las insurgencias rurales, basadas en la revolución cubana fueron repetidamente derrotadas, y un nuevo tipo de revolucionarios comenzó a cambiar el énfasis de sus actividades, orientándolas hacia las ciudades en forma de organizaciones políticas, disturbios civiles y terrorismo”.

Desde la llegada de Hugo Chávez al poder (1999), se inició el proceso de formación de los colectivos. Muchos de sus cabecillas fueron entrenados en Cuba, el régimen se encargo de financiarlos, de dotarlos de armas y adoctrinarlos. De ahí salieron el Tren de Aragua, los distintos colectivos regados por toda Venezuela, su franquicia, la banda del Conejo, la del Koki (Cota 905), la 5 de marzo de José Odremán, La Piedrita y el Alexis Vives.

Ahora con su éxodo por el continente, los ataques dirigidos desde Cuba están desestabilizando a los gobiernos democráticos, de la mano de los cuerpos de seguridad venezolanos-cubanos que están infundiendo el terror en los sectores opositores al régimen de Nicolás Maduro. Se materializa lo escrito por Holt y la advertencia del teniente Ojeda: “...Hoy vinieron por mí; mañana irán por ti”



La burocracia como arma política

Hugo M. Delgado A. En Venezuela el control político fue más sencillo, los gobiernos de Acción Democrática y Copei facilitaron el trabajo...